Hoy le he sacado los colores al silencio de la tarde
He dejado a Wendy en la cama con Peter Pan
Y me he dedicado a recortar caretas con una tijera despuntada
Más que nada para no cortarme, oh, yo, previsor aburrido
De aburrida e insulsa noche de martes mortecina
Y cuando los tallarines estaban ya listos y con curry
Los engullí sin pensarlo demasiado, en estas horas muertas.
En estas horas muertas en las que tú no estás
Cuando caliento la sopa boba con series de televisión
Y de películas en versión original mientras ceno
Y me sirvo vasos de cerveza amarga para uno
Y no la de color verde irlanda que te gusta a ti
Con mi ticket de ida al infierno de la soledad
O enchufo la máquina de los sueños digitales
Claro que a veces se acaba el Baileys o el hielo
Y hay que salir a bucear en la claridad que rodea al bosque
En busca de un puerto oriental que sirva por doce euros
La felicidad en forma de líquido lechoso marrón
Dos culitos, por favor, con dos hielillos que tintineen
O a por huevos a tres euros la docena enana
Talla Mediana o M, amarillos, de corral transgénico
Y la pasta lista para hacer, sin complicaciones arguiñanas
Entonces, dos silencios, de cada página y de cada frase
De la pequeña y nula intención inicial poco queda
Nada más que un suspiro derrotado
Un cúmulo nimbo de rostros extraños
Una montaña de intenciones burócratas
Cuesta adaptarse de nuevo al cautiverio
Cuando se ha tenido todo el tiempo para no hacer nada con él
Pero hay luz al final del túnel
Hay caricias que se pierden en las sábanas
Y sexo hermoso como nunca
Ví, olí, toqué, oí, saboreé, sentí
Y carne en el asador
Y posibilidades de
Y continuidades en los parques
E invenciones de Morel
Ya que tu amor no contradice los míos
Los suma, los potencia
Y me clava a Dostoievski
Me lo añade a la lista
Y a ese poeta extraño en cirílico
Galimatías eslavo
De corazón frío
De sabor caliente
Cuesta, mi amor, y tú lo sabes mejor que nadie
Que navegas con tus velas henchidas
Del sopor de mi soltería decadente y agonizante
Sin saber si colgar los hábitos de puta beata
O acabar por derribar el muro de las lamentaciones
Para que deje de haber diferencias entre tú y yo
Salvo las que vengan dadas por la genética cruel
He dejado a Wendy en la cama con Peter Pan
Y me he dedicado a recortar caretas con una tijera despuntada
Más que nada para no cortarme, oh, yo, previsor aburrido
De aburrida e insulsa noche de martes mortecina
Y cuando los tallarines estaban ya listos y con curry
Los engullí sin pensarlo demasiado, en estas horas muertas.
En estas horas muertas en las que tú no estás
Cuando caliento la sopa boba con series de televisión
Y de películas en versión original mientras ceno
Y me sirvo vasos de cerveza amarga para uno
Y no la de color verde irlanda que te gusta a ti
Con mi ticket de ida al infierno de la soledad
O enchufo la máquina de los sueños digitales
Claro que a veces se acaba el Baileys o el hielo
Y hay que salir a bucear en la claridad que rodea al bosque
En busca de un puerto oriental que sirva por doce euros
La felicidad en forma de líquido lechoso marrón
Dos culitos, por favor, con dos hielillos que tintineen
O a por huevos a tres euros la docena enana
Talla Mediana o M, amarillos, de corral transgénico
Y la pasta lista para hacer, sin complicaciones arguiñanas
Entonces, dos silencios, de cada página y de cada frase
De la pequeña y nula intención inicial poco queda
Nada más que un suspiro derrotado
Un cúmulo nimbo de rostros extraños
Una montaña de intenciones burócratas
Cuesta adaptarse de nuevo al cautiverio
Cuando se ha tenido todo el tiempo para no hacer nada con él
Pero hay luz al final del túnel
Hay caricias que se pierden en las sábanas
Y sexo hermoso como nunca
Ví, olí, toqué, oí, saboreé, sentí
Y carne en el asador
Y posibilidades de
Y continuidades en los parques
E invenciones de Morel
Ya que tu amor no contradice los míos
Los suma, los potencia
Y me clava a Dostoievski
Me lo añade a la lista
Y a ese poeta extraño en cirílico
Galimatías eslavo
De corazón frío
De sabor caliente
Cuesta, mi amor, y tú lo sabes mejor que nadie
Que navegas con tus velas henchidas
Del sopor de mi soltería decadente y agonizante
Sin saber si colgar los hábitos de puta beata
O acabar por derribar el muro de las lamentaciones
Para que deje de haber diferencias entre tú y yo
Salvo las que vengan dadas por la genética cruel
Cayetano Gea Martín
4 comentarios:
Eres genial, Kay.Esta loba negra saqueadora aúlla de gusto bajo la luna, por la luna y por tu poemaaaaaaaaaaaaaaauuuuuuuuuuuuuu :)))))
Me ha encantado ***
Loba negra saqueadora del Calla... Gracias mil por sus aullidos inspiradores... Creo que te has subido a lo alto del Tibidabo, porque los oigo desde Madrid y todo... Je, je...
Besos de la noche...
Umm la verdad es que sí, hoy te has salido...
Hay horas así (ya asaó).
Besote que te va!
(prueba la crema de orujo, más rica que el Bayleys, te lo digo yo jeje)
Me quedo con mi Bayleys, que la crema de orujo me sienta siempre como un tiro...
¡Gracias por los elogios varios!
Besos de crema de café
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