tag:blogger.com,1999:blog-77437212024-03-07T22:28:13.523+01:00Las Ruinas CircularesKayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.comBlogger673125tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-60007703941061889452011-04-20T19:39:00.002+02:002011-04-20T19:49:00.040+02:00Diccionario cínico. Pequeña muestra de la "en" a la "er"<strong>Enano.</strong> En lenguaje político, dícese de aquel partido de escasa o nula importancia, es decir, todos excepto los dos mayoritarios (los que se reparten el pastel) y los nacionalistas (los que se lo comen).<br /><br /><strong>Encanto.</strong> Cualidad propia de los niños que no son nuestros.<br /><br /><strong>Enema.</strong> Agradable lavativa que deja el recto como los chorros del oro. Suele ser de agua, aunque los homosexuales sustituyen dicho líquido por otro.<br /><br /><strong>Engendro.</strong> Monstruo fiero, despiadado y montaraz que en su madurez se dedica a la política.<br /><br /><strong>Enseñanza.</strong> Dícese de la acción de confundir la mente de los estudiantes con conceptos foráneos que no tienen ningún tipo de aplicación en la vida real. Algo así como la labor desarrollada por los próceres de la nación desde las tribunas, los estadios, los mítines y los púlpitos.<br /><br /><strong>Envejecer.</strong> Proceso de encurtido que acontece gracias al paso del tiempo y que, en el caso de los jamones y del vino, suele ser algo positivo. En cuanto a las personas, es otro cantar. La mayoría de la población mundial ve el envejecimiento como algo horrible y desfavorecedor. El ser humano que llegó a una edad más avanzada fue el filósofo y dipsómano griego Homero, que vivió hasta los doscientos cuarenta y tres años. Gracias a su longevidad, hoy disponemos de interesantísimos e inútiles datos acerca del envejecimiento humano extremo. Por ejemplo, sabemos que a partir de los ciento cincuenta años, década arriba o abajo, las personas se convierten en amebas.<br /><br /><strong>Enzima.</strong> Molécula roncera y bigarda que cataliza nuestro organismo piltrafero.<br /><br /><strong>Epifanía.</strong> Revelación absoluta, catártica y pasajera, que descartamos pronto y volvemos raudos al cartón del bingo.<br /><br /><strong>Epílogo.</strong> Vejez.<br /><br /><strong>Episcopado.</strong> Tabernáculo de obispos, que salen todos juntos y de la mano a celebrar, un año más, la victoria de la santa sinrazón católica contra todo lo que se menee.<br /><br /><strong>Episodio.</strong> Cada una de las secciones en las que se divide la bazofia de libro que lee usted cuando va a la peluquería, señora.<br /><br /><strong>Epitafio.</strong> Frase jocosa que ornamenta la tumba del difunto, supuestamente dicha por él o ella. Casi siempre, son añadidos a posteriori para hacer más interesante la paupérrima personalidad del finado.<br /><br /><strong>Epopeya.</strong> Relato épico que narra las mentiras cometidas por supuestos héroes de la antigüedad. La epopeya más famosa, la odisea, fue pergeñada por ese cúmulo de escritores antiguos llamados todos Homero, como una marca corporativa. En dicha epopeya se relata en verso las andanzas y desventuras de Odiseo (Ulises, en su versión romana y en Hollywood). Odiseo era un mercader de ganado que viajaba por todo el mar Egeo con la sana intención de librarse de su ardiente (con todos menos con él) esposa, llamada Penélope García. En sus andanzas, conoció a muchas personas y entabló amistad copulativa con la mayoría de ellas. Aparte de semejante proeza física y de emborracharse hasta el punto de ver sirenas y cíclopes, poco más hizo. A su retorno al hogar, descubrió que su querida esposa se los había puesto de todos los colores. Montando en cólera, asesinó a medio distrito. Apenado y seriamente arrepentido ante tanta crueldad, decidió abrir un puesto de bocadillos de calamares en el Retiro, donde, todavía hoy, se le puede encontrar, mansamente dormido entre panecillos y botes de mostaza.<br /><br />Ermitaño. Anacoreta solitario que, en vez de mantenerse en contacto con la sociedad, decide quedarse en su paupérrimo lar, engullendo aperitivos salados, practicando compulsivamente el onanismo y viendo antiguas reposiciones televisivas de series checoslovacas. El primer ermitaño fue Pablo, el egipcio, un enclenque barbudo que es venerado por los católicos. Entró en el santoral gracias a su bendita habilidad de eliminar los piojos por intermediación de la ira divina. Se sabe que murió decapitado a los noventa y cuatro años por un testigo de Jehová algo picajoso. Su cabeza embalsamada ha estado dando vueltas por Europa cerca de quinientos años, ya que se le atribuyen poderes milagrosos. Se rumorea que, en la actualidad, reposa en el despacho de José María Aznar.<br /><br /><strong>Erotismo.</strong> Muestrario de carne que pone nervioso a los seres humanos, y a los hombres también.<br /><br /><strong>Eructo.</strong> En los países mediterráneos, acción y efecto de hablar.<br /><br /><br /><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-80885723173706396692011-04-08T20:48:00.002+02:002011-04-08T20:56:03.698+02:00Diccionario cínico. Pequeña muestra de la "ec" a la "em"<div align="justify"><strong>Ecología.</strong> Ciencia que defiende la naturaleza como si ésta valiera para algo. Las personas que siguen esta corriente de pensamiento se denominan ecologistas. Suelen ser individuos barbudos (ellas también), sucios y mal alimentados. Y te cortan el rollo si los invitas a una barbacoa. </div><br /><div align="justify"><strong>Economía.</strong> Monopoly gigante, real y, por ende, más peligroso. Rige los designios de los pobres mortales. El mayor estudioso de la economía actual capitalista fue Groucho Marx, cuya definición de la misma sigue siendo, hoy por hoy, la más consensuada entre los calvos y doctos expertos económicos: “la parte contratante de la primera parte será considerada como la parte contratante de la primera parte”.</div><br /><div align="justify"><strong>Ecuador.</strong> País centroamericano que comparte capital con España.</div><br /><div align="justify"><strong>Ecuménico.</strong> Dícese de cualquier fenómeno de carácter universal, como las hemorroides, la resaca o los dolores de cabeza femeninos a la hora del coito.</div><br /><div align="justify"><strong>Edad.</strong> Gran putada numérica, si pasa de los cincuenta.</div><br /><div align="justify"><strong>Edipo.</strong> Príncipe de Tebas que sentía un intenso amor hacia su madre.</div><br /><div align="justify"><strong>Ejecución.</strong> Zanjar, definitivamente, un problema entre el estado y un individuo, en detrimento de éste.</div><br /><div align="justify"><strong>Ejército.</strong> Grupo de inútiles e inadaptados sociales que, incapaces de trabajar en otra cosa, sirven como carne de cañón en los frentes de batalla.</div><br /><div align="justify"><strong>Electricidad.</strong> Fuerza de la naturaleza poco fiable que hace que funcione el televisor y las luces de casa, y que usted debe pagar en cómodos mensualidades. La electricidad fue descubierta en el siglo III por un monje budista, al contemplar la magnífica energía luminosa que poseían las luciérnagas.</div><br /><div align="justify"><strong>Elefante.</strong> Mamífero africano que posee las patas de una señora.</div><br /><div align="justify"><strong>Elemento.</strong> Una de las cuatro unidades primigenias en las que los antiguos griegos dividieron toda materia (con fines alquimistas y pecuniarios, todo hay que decirlo). Estos cuatro elementos son: hez, polución, incendio y lixiviados.</div><br /><div align="justify"><strong>Elfo.</strong> Criatura ficticia típica de la mala prosa folclórica y de la aún peor que pulula por la ¿literatura? denominada “fantasía épica”. El elfo es un trasunto entre un delgaducho imberbe amante de la música New Age y un homosexual reprimido y orejudo con tendencia a sacar de quicio al más pintado con sus modales pausados, como si hubiera consumido estupefacientes al por mayor.</div><br /><div align="justify"><strong>Emancipación.</strong> Día glorioso en el que los padres se libran de una vez de sus hijos y recuperan el cuarto de baño como algo propio.</div><br /><div align="justify"><strong>Embutido.</strong> Cadáver encurtido de rica grasa de cerdo cancerígeno.</div><br /><div align="justify"><strong>Emigrante.</strong> Esclavo moderno e importado desde otro sitio más pobre, donde resultan más baratos. Un emigrante es un ser humano venido a menos, sin derecho alguno, salvo el de trabajar hasta romperse el espinazo, morir joven, emborracharse e insuflar nuevos aires multicolores a los barrios más desfavorecidos de las grandes ciudades del primer mundo, con sus puestos de comida y sus alegres melodías étnicas que resuenan por todo el bloque un martes cualquiera a las tres de la mañana.</div><br /><div align="justify"><strong>Empatía.</strong> Capacidad inexistente de percibir como propios los mezquinos problemas de los demás. Es la excusa de los débiles de carácter para excusarse en sus acciones. El célebre orador y retórico romano Cicerón era famoso por su exceso de empatía, tanto es así que pasó de ser un firme defensor de los valores de la república a un veleta bien pagado del nuevo imperio.</div><br /><div align="justify"><strong>Emperador.</strong> Versión 2.0 de un rey, mucho más poderoso que éste. El poder del emperador abarca varias naciones, o mejor dicho, abarcaba. Lo de los emperadores es una cuestión del pasado. Hoy en día, su papel es llevado a cabo por los accionistas mayoritarios de las multinacionales más pintureras. El emperador era amado y respetado por todos sus súbditos, salvo por aquellos que no, que eran mayoría. Solían acabar mal sus días, después de toda una vida de lujo, vicio y sana depravación. El emperador más famoso de la historia fue Julio César, el cual nunca llegó a serlo.</div><br /><div align="justify"><strong>Emplear.</strong> Contratar a un esclavo para que haga el trabajo sucio.</div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"><strong>Empresa.</strong> Barco pirata que surca con brava porfía los turbulentos mares de las finanzas. Qué frase más sublime.</div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-11636823915978591042011-04-01T16:27:00.014+02:002011-04-01T17:32:05.773+02:00Diccionario personal. Pequeña muestra de la "da" a la "de"<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiBmFozpSOcP4PoVD0StndDS2Yzyt1hZg_-NJQ8-OfrLQIJ1KTaMWI1QyzWnkY9wNPKjchieOSOJ0RRoUwL1bdG0A2Vm2CnOTubTpl9_39mrkvdsbwRAT6AJrAJdw6UOlkM_kC/s1600/01.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5590638302612000386" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 320px; CURSOR: hand; HEIGHT: 162px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgiBmFozpSOcP4PoVD0StndDS2Yzyt1hZg_-NJQ8-OfrLQIJ1KTaMWI1QyzWnkY9wNPKjchieOSOJ0RRoUwL1bdG0A2Vm2CnOTubTpl9_39mrkvdsbwRAT6AJrAJdw6UOlkM_kC/s320/01.jpg" border="0" /></a> <br /><div align="justify"><strong>Daltonismo.</strong> Desconcierto cromático, cuyo síntoma más característico es el confundir las rayas negras y amarillas de los trajes de presidiario de los hermanos Dalton.</div><br /><div align="justify"><strong>Dama.</strong> Mujer con delirios de grandeza.</div><br /><div align="justify"><strong>Decena.</strong> Conjunto de diez cosas inútiles.</div><br /><div align="justify"><strong>Dedo.</strong> Apéndice deforme y peludo que cuelga de las manos y los pies de los seres humanos, en tandas de cinco. Los dedos sirven para sacarse fluidos mucosos de las cavidades del cuerpo, mandar a freír espárragos al vecino y masturbarse.</div><br /><div align="justify"><strong>Deidad.</strong> Especie de criatura superior a usted, señora, a la que los humanos de todos los tiempos, culturas y religiones gustan de rendir pleitesía, como si se tratara de un dios.</div><br /><div align="justify"><strong>Delfín.</strong> Cetáceo con ínfulas que se las da de listillo. Se cree mamífero y más listo que nosotros, el muy prepotente. Afortunadamente, los pescadores japoneses no dudan en sacarlo de su craso error.</div><br /><div align="justify"><strong>Democracia.</strong> Sistema de gobierno que, teóricamente, es la dictadura de la mayoría estúpida. En la práctica, empero, la democracia es la tiranía de los cuatro de siempre; aunque eso sí, de buen rollito. Fue inventada, como tantas otras cosas nefandas, por los griegos de antaño (los de ahora no inventan gran cosa, la verdad), como tapadera legal para poder practicar gozosamente la sodomía. La democracia, en aquel entonces, se aplicaba únicamente a los ciudadanos libres. Los esclavos seguían siendo tiranizados y dados por el culo, literalmente, en este caso. Con el paso de los siglos, otros pueblos fueron contagiándose de esta fiebre democrática, hasta llegar a nuestros días. Hoy por hoy, la democracia es considerada por sus defensores como el menos malo de los sistemas, lo cual ya dice bien poco sobre ella. Las grandes potencias mundiales, después de siglos de joder en casa propia y ajena con regímenes ligeramente menos liberales, son todas demócratas a más no poder. Tanto es así, que se unen en alegres coaliciones que intentan imponer por pelotas su cutre sistema político en el resto del mundo. Y el futuro es cada día más brillante, niños y niñas.</div><br /><div align="justify"><strong>Demostrar.</strong> Evidenciar la inutilidad de algo que creíamos válido.</div><br /><div align="justify"><strong>Depravado.</strong> Dícese de aquel pervertido sujeto que colecciona fotos de su mujer en ropa interior.</div><br /><div align="justify"><strong>Derecha.</strong> En política, aplícase al espectro ideológico que va desde el conservadurismo más suave hasta el fascismo más trasnochado, pasando además por aquellos partidos de ideología supuestamente de izquierdas que no dudan en cambiarse de camisa si la ocasión y el mercado de valores lo merecen.</div><br /><div align="justify"><strong>Derrocar.</strong> Cambiar a un tirano por otro.</div><br /><div align="justify"><strong>Descargar.</strong> Bajar cualquier tipo de material de ocio (lúdico, intelectual o lúbrico) de la red a nuestro ordenador. En España, tal acción se considera un delito, y se castiga con humillación pública, confiscación de bienes, cinco meses de cárcel y un tatuaje de la SGAE en el culo.</div><br /><div align="justify"><strong>Desnudez.</strong> Exhibicionismo propio de las plantas y de los animales. Y de algún que otro.</div><br /><div align="justify"><strong>Destetar.</strong> Gran putada.</div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-49272468117405790472011-03-04T14:53:00.013+01:002011-03-04T17:06:25.471+01:00Diccionario personal. Pequeña muestra de la "co" a la "cu"<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPK3mbwlp5j6Mr3HL3-Vns8K3HJfYR0Z6MmpJxwzogcDTczBKiBgi4bq6erlaosyb_6BplV15HV2g7w3UXVRyDcVRSHUDkqmxlnU5Ovw0kmEsJq0vPRM2ydL9RwSc1sMOz3CxY/s1600/post-3783-1254960774.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5580224380208355906" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 320px; CURSOR: hand; HEIGHT: 213px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgPK3mbwlp5j6Mr3HL3-Vns8K3HJfYR0Z6MmpJxwzogcDTczBKiBgi4bq6erlaosyb_6BplV15HV2g7w3UXVRyDcVRSHUDkqmxlnU5Ovw0kmEsJq0vPRM2ydL9RwSc1sMOz3CxY/s320/post-3783-1254960774.jpg" border="0" /></a><br /><strong>Cobrar.</strong> Recibir una limosna de un ser superior, es decir, del jefe de turno. Con dicha dádiva, la clase media consigue engañar al hambre con productos de desecho, darle una educación mediocre en entornos hostiles a sus vástagos y pagar la hipoteca. <div align="justify"><br /><strong>Cocinero.</strong> Envenenador profesional y perverso alquimista. El cocinero cumple con el ritual mágico de convertir materia prima podrida en bazofia comestible. </div><div align="justify"><br /><strong>Coco.</strong> Fruto tropical con el que se acojona a los niños pequeños. </div><div align="justify"><br /><strong>Colateral.</strong> Dícese de los molestos patos de feria que tienden a ponerse, muy desconsideradamente, delante del punto de mira. </div><div align="justify"><br /><strong>Colon.</strong> Lanzadera de las heces. Cañón orgánico que dispara mierda una o dos veces al día, más o menos. </div><div align="justify"><br /><strong>Combustible.</strong> Plausible excusa para hacer la guerra. </div><div align="justify"><br /><strong>Compasión.</strong> Mostrar piedad ante quien no la merece, sobre todo cuando ya no entraña un riesgo para uno. </div><div align="justify"><br /><strong>Computadora.</strong> Inteligencia artificial capaz de procesar muchísima más información que un ser humano, con la considerable ventaja de no sudar como un cerdo ni de parar cada dos horas a tomarse un café. </div><div align="justify"><br /><strong>Condecorar.</strong> En asuntos bélicos, acción de premiar a un asesino por su valentía. </div><div align="justify"><br /><strong>Confesión.</strong> Acción consistente en relatar los pecados cometidos a alguien mucho más pecador que nosotros mismos y que, dada su mayor experiencia, nos puede asesorar. </div><div align="justify"><br /><strong>Confucio.</strong> Primer accionista de una cadena de restaurantes chinos, hace mucho tiempo, cuando la humanidad aún estaba en pañales. Kung Fu Tse es famoso por promulgar cosmologías filosóficas irrealizables de buen rollito y paz universal en su tiempo libre. Murió frustrado, sin llegar a enterarse del final de Perdidos. </div><div align="justify"><br /><strong>Consolador.</strong> Ventajoso pene a pilas, que ahorra el tener que cargar con el resto del hombre. </div><div align="justify"><br /><strong>Convento.</strong> Especie de Gran Hermano para religiosas. Sin tabaco y sin sexo, teóricamente. </div><div align="justify"><br /><strong>Conversar.</strong> Discutir. </div><div align="justify"><br /><strong>Coño.</strong> Interjección de uso muy común en la lengua española, que en su versión primigenia hacía referencia a los conejos. En la actual, también. </div><div align="justify"><br /><strong>Coprofagia.</strong> Acción consistente en ingerir las heces que producen los políticos cada vez que hablan. Es una labor propia del electorado general.</div><div align="justify"><br /><strong>Coquetería.</strong> Superficial actitud propia de la gente fea. </div><div align="justify"><br /><strong>Cosecha.</strong> Método antiguo de producción vegetal, consistente en recoger la siembra del suelo, en lugar de hacerlos de las baldas del supermercado, como las personas civilizadas. </div><div align="justify"><br /><strong>Cuartel.</strong> Conjunto de edificios donde, en los países democráticos, se encierra a los militares para que estos no se hagan con el poder. </div><div align="justify"><br /><strong>Cuento.</strong> Relato corto, generalmente falso, con algo de moralizante y fantasioso. Suele estar mal escrito, pero tiene la ventaja de no ser demasiado extenso, lo que facilita su pronta lectura y posterior eliminación de nuestra memoria. </div><div align="justify"><br /><strong>Cultura.</strong> El ministerio menos favorecido, casi siempre relegado a algún inútil inculto, lo cual no deja de resultar irónico. </div><div align="justify"><br /><strong>Cunnilingus.</strong> Acción consistente en darle de lametazos a un conejo, para escándalo de éste. </div><div align="justify"><br /><strong>Curso.</strong> Educación extra que se nos da para que confundamos los conceptos ya aprendidos o no aprendamos los nuevos.</div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-50538202410209729122011-02-23T16:23:00.000+01:002011-02-23T16:33:00.027+01:00Another day in the first world<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8yx9gFC9pLhMQC2mbh7p6-3o_TDJTWhpWIgbJbipmrp7rVtKV2pOMA_Nb2Rb6v65Ddb40_Y_6s1ELY7_fRfzdegtXlQqsV-TRmexNIMI9Vji3yeaaR-eB8uO-S0yiSxfPbB6m/s1600/Walking.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5576908349962573938" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 309px; CURSOR: hand; HEIGHT: 224px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg8yx9gFC9pLhMQC2mbh7p6-3o_TDJTWhpWIgbJbipmrp7rVtKV2pOMA_Nb2Rb6v65Ddb40_Y_6s1ELY7_fRfzdegtXlQqsV-TRmexNIMI9Vji3yeaaR-eB8uO-S0yiSxfPbB6m/s320/Walking.jpg" border="0" /></a><br /><div align="center"></div><br /><div align="center"><br />Another sunny day in the first world<br />(I know it sounds like a bad feel),<br />Walking for a while, feeling my limbs:<br />Destination nowhere, hereby I disallow<br /><br />Roaming through the city luminous guts,<br />I can see them all: the sinner and saint,<br />The poet and illiterate, the sick and sage,<br />The eremite and rover, the healthy and broke<br /><br />But you’re not here, and I miss thee,<br />And I nuisance my shattered free will:<br />Too much to spare, nothing to carry on<br /><br />So this nightfall, after crossing the Rubicon,<br />I will see you again, and in your arms<br />I will find redemption one more time</div><div align="center"> </div><div align="center"> </div><div align="center"><em><strong>Cayetano Gea Martín</strong></em></div><div align="center"> </div><div align="center"> </div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-2816974087192032182011-02-17T14:36:00.002+01:002011-02-17T14:52:50.787+01:00Diccionario personal. Pequeña muestra de la "ce" a la "ci"<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiog8G70LMckNtNAesJsMjqkfr4vN7UqWxlxhIP4m0paaVj6e8pzedVUoCo4QdqfqSWFN5NVpLPztT9IcUE6R1ZIcd5maEa2-NsscdcePXulgIx8btXOXw6hwnHelqvVe4_coIG/s1600/dictionary_department_244325.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5574652261812257170" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 274px; CURSOR: hand; HEIGHT: 348px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiog8G70LMckNtNAesJsMjqkfr4vN7UqWxlxhIP4m0paaVj6e8pzedVUoCo4QdqfqSWFN5NVpLPztT9IcUE6R1ZIcd5maEa2-NsscdcePXulgIx8btXOXw6hwnHelqvVe4_coIG/s320/dictionary_department_244325.jpg" border="0" /></a><br /><div align="justify"></div><div align="justify"><strong>Cebolla.</strong> Lacrimógena hortaliza, muy apreciada por los cocineros mediterráneos. Su ingesta prolongada garantiza la soltería y el celibato del consumidor. </div><div align="justify"> </div><div align="justify"><br /><strong>Celta.</strong> Antigua civilización negra bastante infumable. </div><div align="justify"><br /><strong>Cena.</strong> Exceso gástrico al albur de la noche. Casi siempre innecesario y poco sano. Consiste en devorar en pocos minutos las grasientas sobras de la comida. De postre suele haber acidez de estómago, pesadillas nocturnas y constantes buches de agua a lo largo de toda la noche. </div><div align="justify"><br /><strong>Centímetro.</strong> Unidad de medida que sirve para tasar el órgano viril masculino. Tiene otras aplicaciones, pero menos importantes, humillantes o divertidas. </div><div align="justify"><br /><strong>Céntrico.</strong> Piso que nos venden o alquilan como tal, aunque se encuentre en Pueblo Nuevo. </div><div align="justify"><br /><strong>Cerca.</strong> Lo que no está George Clooney de usted, señora. </div><div align="justify"><br /><strong>Certeza.</strong> La infalible seguridad de estar convencido acerca de algo que no se sabe. </div><div align="justify"><br /><strong>Cervantes.</strong> Escritor de poca monta del mal llamado Siglo de Oro. Su personaje más célebre es más famoso que él propio escritor. </div><div align="justify"><br /><strong>Ceuta.</strong> Pequeña ciudad africana colonizada por unos españoles que se bajaron al moro. El clima de Ceuta es típicamente continental templado, con suaves temperaturas en verano que raramente superan los sesenta grados centígrados. Marco Pelidaceno Julio Apostinio, el célebre poeta romano, murió en esta ciudad debido a una mala combinación de cuscús, garbanzos torrados y mes de agosto. </div><div align="justify"><br /><strong>Chauvinismo.</strong> Falacia consistente en creer que el país de uno es la tierra prometida, que el maná brota de los pechos de nuestras conciudadanas, que los políticos son honrados y trabajan por el bien común, y que nuestra gastronomía asquerosamente saturada de lípidos es la mejor del mundo. </div><div align="justify"><br /><strong>Chocho.</strong> Persona de avanzada edad cuyo cerebro ya no rige del todo bien. U otra cosa. </div><div align="justify"><br /><strong>Chorizo.</strong> Político curtido. </div><div align="justify"><br /><strong>Chupete.</strong> Plástico sustitutivo de la teta materna, que se le enchufa a los bebés, lo cuales se acaban conformando, de mal grado, eso sí. Es el primer eslabón de la infinita cadena de decepciones provocadas por reemplazos ineficaces que tiene que soportar el ser humano a lo largo de su estúpida e insignificante vida. </div><div align="justify"><br /><strong>Churro.</strong> Desayuno grasiento hasta el infarto, típico de la sana cocina mediterránea. </div><div align="justify"><br /><strong>Cianuro.</strong> Bebida representativa que suele acompañar los festejos de las bodas de plata de una pareja. Y si no es así, debería serlo de manera preceptiva. </div><div align="justify"><br /><strong>Ciclista.</strong> Motero pobre. </div><div align="justify"><br /><strong>Circo.</strong> Grupúsculo itinerante de gentuza cuyos payasos dan miedo y sus fieras salvajes dan risa. </div><div align="justify"><br /><strong>Cisma.</strong> Alegre discordia, generalmente de índole religiosa o familiar, como cuando papá decide irse con su secretaria y dejarnos tirados, señora. Históricamente, el más famoso fue el Gran Cisma de Occidente, en 1054, que dividió el, por aquel entonces, equipo único en dos: Real Madrid Club de Fútbol y Club Atlético de Madrid. </div><div align="justify"> </div><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><br /><div align="justify"></div><br /><div></div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-60315282598007403412011-02-07T14:54:00.003+01:002011-02-07T16:27:40.451+01:00Diccionario personal. Pequeña muestra de la "ca"<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQdKf59dqaHW8aWY0sb8pJABMVxpZBE0vUo9zRX6npDptmdWpuTz4RrIxZgUOQxphXa_mcMgHHQzk1Nn0pjRUs2lKOxYaCJJ6pk5mziaknxSFfuEI-T_PDUGWOW36hyPdQ1zpA/s1600/Mi+problem.gif"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5570946570332211026" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 260px; CURSOR: hand; HEIGHT: 312px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjQdKf59dqaHW8aWY0sb8pJABMVxpZBE0vUo9zRX6npDptmdWpuTz4RrIxZgUOQxphXa_mcMgHHQzk1Nn0pjRUs2lKOxYaCJJ6pk5mziaknxSFfuEI-T_PDUGWOW36hyPdQ1zpA/s320/Mi+problem.gif" border="0" /></a><br /><div align="justify"><strong>Caciquismo.</strong> El sistema de gobierno más común en España, desde siempre, y el que tiene más solera. Consiste en gobernar como si tus conciudadanos fueran tus esclavos y como si el pedazo de terruño que te ha tocado en suerte fuera tu cortijo particular, en el cual puedes organizar saraos, desfalcos y urbanizaciones. El cacique es un ser parasitario, un dictador de paisano y con tirantes, propenso a los puros, a los excesos gástricos y alcohólicos, a jugar con el dinero de sus vecinos al bingo y a las putas.</div><div align="justify"><br /><strong>Calavera.</strong> Cabeza ósea desprovista de piel y de chicha, muy útil para acojonar a los infantes. La más famosa calavera sea quizá la de Horacio, el amigo algo desmejorado de Hamlet, y que rehusó a irse de copas con éste, por miedo a que se le derramara el vaso de vodka danés por el esfenoides. En sentido figurado, un calavera es un crápula que se lo pasa guapamente pero que goza de muy mala prensa entre sus conciudadanos. </div><div align="justify"><br /><strong>Cáliz.</strong> Celebrada copa pretérita que utilizaban Jesucristo y sus colegas cuando se iban de farra. El cáliz sagrado tenía la divina habilidad de convertir cualquier brebaje en tintorro y de no vaciarse nunca. Es por ello que los buscadores de tesoros llevan siglos pretendiendo hallarlo. Nada más rápido que encontrar a Dios mediante tamaña y monumental cogorza, está claro. </div><div align="justify"><br /><strong>Calor.</strong> Agradable sensación de aumento de la temperatura que se produce en el interior de todo hombre de campo adulto y no homosexual al presenciar el desnudo integral de una cabra. </div><div align="justify"><br /><strong>Campo.</strong> Vertedero público. </div><div align="justify"><br /><strong>Canarias.</strong> Archipiélago español en África cuyos habitantes odian a muerte todo aquello que huela a peninsular. Tanto es así que, por joder, atrasan sus relojes una hora. El hecho que suelen imputar para justificar tanta antipatía es que los españoles masacraron a todos los guanches (primitivos habitantes de las islas que tenían costumbres tan civilizadas como despeñar a sus hijas por acantilados como sana medida cinegética), cuando ninguno de ellos desciende de estos afables bereberes. </div><div align="justify"><br /><strong>Canibalismo.</strong> Escuela filosófica que promueve alcanzar la sabiduría asimilando todo lo que se pueda del prójimo. </div><div align="justify"><br /><strong>Cantautor.</strong> Inútil sujeto en posesión de una guitarra y que desea fervientemente una subvención del Partido Socialista. </div><div align="justify"><br /><strong>Capitalismo.</strong> Mañoso sistema económico y político propio de los países occidentales. El capitalismo básicamente consiste en producir riqueza de forma colectiva para que la disfruten sólo unos propios privilegiados, que son los que montaron todo este tinglado (muy hábiles, ¿eh?). Es contrario al comunismo, aunque no por ello menos repulsivo que éste. </div><div align="justify"><br /><strong>Capítulo.</strong> Partes en las que se divide un libro y que permiten que uno pueda descansar a ratos de su lectura y no morir así del asco. </div><div align="justify"><br /><strong>Caribe.</strong> Resort de Estados Unidos, salvo por un par de islas insurrectas. El Caribe es una zona geográfica que sufre un calor infernal, unos mosquitos como cabezas de cerdo, y más enfermedades mortales que en los conductos del aire de los hospitales españoles. </div><div align="justify"><br /><strong>Caricia.</strong> Meter mano a alguien de manera suave y consentida, aunque con el mismo fin. </div><div align="justify"><br /><strong>Carisma.</strong> Cualidad no innata en los líderes (históricos y futuros) del Partido Popular. </div><div align="justify"><br /><strong>Cartera.</strong> Objeto de piel o de plástico, que sirve para guardar el dinero que no se tiene. </div><div align="justify"><br /><strong>Castellano.</strong> Antiguo dialecto del español de uso extendido por las dos pretéritas castillas. La simplicidad de su léxico y gramática hicieron de él un dialecto perfecto para los cabreros, campesinos y demás gente acomodada de mal vivir. El culpable de su insana proliferación fue Miguel de Cervantes, que elevó a categoría de idioma tamaño gruñido dialectal. </div><div align="justify"><br /><strong>Caucásico.</strong> Denominación de connotación racista, utilizada a modo de insulto por los negros y chinos, no sin motivo. Los caucásicos son unos individuos débiles, propensos a engordar y a emborracharse, que nunca escuchan y que gustan de inventarse religiones y de pisotear otras culturas. Además, su piel lechosa no les protege adecuadamente de la radiación solar, y suelen morir abrasados en las playas y en los arcenes. </div><div align="justify"> </div><div align="justify"> </div><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><div align="justify"> </div><div align="justify"> </div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-77870310442152245122011-01-28T16:48:00.001+01:002011-01-28T16:51:30.264+01:00¿Moraleja?- Padre, ¿por qué me has abandonado?-, le dijo Dios al hombre cuando éste descubrió la termonidámica.Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-86549400146927186462010-12-30T19:54:00.002+01:002010-12-30T20:02:51.330+01:00Diccionario personal. Pequeña muestra de la B<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYnzeMoKiFZ8v_cn1KAqUpzdmDf3UdFxUA6pNx0Hq5TRIvbdOasekaYp44y47HINYLExKep4R2sSGmspurYs1asjbNVdOX-09ddBF4-VnFgQ5SMBgrq5g7k7TbMdDKeSOSs-4X/s1600/diccionarioRAE.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5556550834790519138" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 293px; CURSOR: hand; HEIGHT: 320px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiYnzeMoKiFZ8v_cn1KAqUpzdmDf3UdFxUA6pNx0Hq5TRIvbdOasekaYp44y47HINYLExKep4R2sSGmspurYs1asjbNVdOX-09ddBF4-VnFgQ5SMBgrq5g7k7TbMdDKeSOSs-4X/s320/diccionarioRAE.jpg" border="0" /></a><br /><div align="justify"></div><div align="justify"><strong>Baleares.</strong> Pintorescas islas sitas en la costa mediterránea española y que forman la Bundesländ número 17 de la República Federal Alemana. </div><div align="justify"><br /><strong>Ballet.</strong> Ataque epiléptico en público y pagando. En la antigüedad, el ballet era utilizado como poderoso somnífero. Hoy en día, empero, es un simple y mondo coñazo. </div><div align="justify"><br /><strong>Bandido.</strong> Político o banquero (o ambas cosas). </div><div align="justify"><br /><strong>Barcelona.</strong> Ciudad del noreste de España o del suroeste de Europa o la capital de los Países Catalanes, según la idiosincrasia de cada cual. En cualquier caso, Barcelona es una ciudad, y bien hermosa, de eso estamos todos seguros, señora. Barcelona fue fundada en el siglo IV A. de J.C. por polacos que huían del frío de Varsovia. Los barceloneses son famosos por ser desprendidos y dadivosos. Y por servir las mejores tapas de toda la Península Ibérica. </div><div align="justify"><br /><strong>Bautismo.</strong> Antigua práctica ritual consistente en meter a un niño o a un adulto trastornado en agua para lavar sus pecados. Afortunadamente, hoy en día existen piscinas. </div><div align="justify"><br /><strong>Beneficencia.</strong> Acción caritativa a la que juegan las damas de la alta sociedad, consistente en dar comida y abrigo a un pobre y dejar que se mueran el resto. </div><div align="justify"><br /><strong>Biblia.</strong> El señor de los anillos hebreo. Panfleto subversivo y metafórico que contiene la palabra de Dios, o eso afirman quienes lo escribieron, claro. De cualquier manera, la biblia es un gran libro (por número de páginas también) que contiene numerosos pasajes de sorprendente belleza y claridad, como aquel en el que el pastor Nefagoah se enfrenta en Petantabet al querosipali en el cuitadero de Magarafisetahbén. La veracidad de la biblia ha sido muy criticada, ya que según la traducción, el significado de un pasaje en particular puede cambiar radicalmente. Famoso es el versículo XIX, capítulo CLI, manípula III, centuria MCIV, que dice así en latín: <em>“Redemptionis arcanum sedulo ipsa perscrutata Ecclesia”.</em> Empero, la traducción española a cargo de Fray Huruarto de la Pena Mora del siglo VII dice: “Dos de gambas, tres cañas y una de calamares”. </div><div align="justify"><br /><strong>Bienestar.</strong> Agradable sensación de salud y de placer que no suele durar mucho. </div><div align="justify"><br /><strong>Bikini.</strong> Prenda de vestir impuesta por la iglesia católica para evitar que las monjas octogenarias caigan en la concupiscente (y desagradablemente visual) tentación del top-less. </div><div align="justify"><br /><strong>Bilingüe.</strong> Persona que posee la habilidad de cometer errores gramaticales en dos idiomas. </div><div align="justify"><br /><strong>Bizancio.</strong> Especie de prórroga del difunto imperio romano oriental, y que duró hasta la tanda de penaltis, casi mil años después. Los bizantinos eran un pueblo de profunda religiosidad y belicismo: eran capaces de rezar con piadosas lágrimas en los ojos y momentos más tarde sacarle a un hereje los testículos por las cuencas de los ojos. </div><div align="justify"><br /><strong>Bohemio.</strong> Peligroso individuo carente de inteligencia que gusta de llevar una vida regalada y pseudo-cultural. El bohemio odia la sociedad en la que vive, aunque no lo suficiente como para no poner el cazo siempre que puede. La vida de este “perfect gentleman” se basa en la epicúrea búsqueda de placer. Afortunadamente, y debido a tanto exceso báquico, viven poco. </div><div align="justify"><br /><strong>Bola.</strong> Conjunto de nueve canicas tamaño XXL que si se consiguen reunir todas, aparece un dragón mágico japonés que concede deseos. </div><div align="justify"><br />Borbón. Miembro de la noble realeza congénita española, con propensión a multiplicarse cual estafilococo en un pañuelo usado, a pesar de sus múltiples taras genéticas (la del Borbón, no la de la simpática bacteria grampositiva). La casa de Borbón lleva destruyendo el país desde hace más de trescientos años, cuando substituyeron a otro linaje todavía más hemofílico y ruinoso, el de los Austrias. En todo el tiempo que llevan reinando, la dinastía borbónica ha llevado a cabo importantes reformas y modernos avances en esta tierra de conejos, tales como mantener y reabrir el Santo Oficio, patrocinar dictadores y golpes de estado, e ir a cagarse en casa ajena. Los Borbones, tales como el actual, sienten predilección por la jarana y los coños ajenos, lo cual, por desgracia, ha impedido su natural extinción. </div><div align="justify"><br /><strong>Bosque.</strong> Conjunto de árboles, más o menos desorganizado e infestado de repugnantes alimañas y de domingueros. En España, terreno edificable que se extiende entre dos urbanizaciones. </div><div align="justify"><br /><strong>Boxeo.</strong> El noble arte de repartir y de recibir hostias por voluntad propia. </div><div align="justify"><br /><strong>Búnker.</strong> Cobertizo donde Hitler y sus amigos jugaban al escondite con los rusos. </div><div align="justify"><br /><strong>BUP.</strong> Antiguo sistema educativo español, si es que “educativo” y “español” pueden ir en la misma frase, claro. </div><div align="justify"><br /><strong>Burdel.</strong> Ayuntamiento.</div><div align="justify"> </div><div align="justify"> </div><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><div align="justify"> </div><div align="justify"> </div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-15399718580919252782010-12-27T17:48:00.002+01:002010-12-27T18:00:30.509+01:00Burradas léxicas de famosos“Cada vez que veo en la Tele a esos pobres niños hambriento del mundo, no puedo sino llorar. Quiero decir que me encantaría estar tan delgada; pero no con todas esas moscas y la muerte y todo eso.” <em>Mariah Carey.</em><br /><br />“El único artista alegre es el artista muerto, por que sólo entonces no puedes cambiar. Después de que muera, probablemente volveré como en forma de pincel.” <em>Sylvester Stallone.</em><br /><br />“Creo que el matrimonio homosexual es algo que debería darse entre un hombre y una mujer.” <em>Arnold Schwarzenegger.</em><br /><br />“No he cometido ningún delito. Lo que hice fue no cumplir con la ley.” <em>Jennifer López.</em><br /><br />“Fumar mata. Si mueres, pierdes una parte muy importante de tu vida.” <em>Brooke Shields.</em><br /><br />“Debo todo a mis padres, especialmente a mi padre y mi madre.” <em>Greg Norman.</em><br /><br />“Creo que Dios es un vibrador gigante en el cielo… una fuerza vibrante de increíble energía.” <em>David Arquette.</em><br /><br />“Habla ingles, castellano y además es bilingüe.” <em>Don King.</em><br /><br />“Me encuentro mejor que nunca cuando soy feliz.” <em>Winona Ryder.</em><br /><br />“Es realmente difícil mantener una relación de pareja cuando tu pareja no te deja tener relaciones con otras personas.” <em>Axl Rose.</em><br /><br /><br /><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-39893753561381694622010-12-02T20:38:00.002+01:002010-12-02T20:41:41.949+01:00Diccionario huero. Pequeña muestra segunda de la A<strong>Alegría.</strong> Peligroso estado pasajero en el cual volvemos a ver todo con ojos de niño. Afortunadamente, pasa pronto y acontece la tristeza, volviendo a ser unos adultos frustrados conscientes de estar más cerca de la tumba cada día que pasa.<br /><br /><strong>Alemania.</strong> País exportador de turismo e importador de turcos. Los alemanes son unas criaturas curiosas que igual resultan ser los mejores amigos del mundo. En otras ocasiones, no obstante, pueden hacer jabón para sus vecinos. Quiero decir, de sus vecinos.<br /><br /><strong>Alimento.</strong> Inmundicia generalmente mal cocinada que hemos de ingerir para no morir de golpe. En su lugar, preferimos devorar comida que nos vaya matando poco a poco, sin prisa. Los alimentos pueden ser de origen vegetal o animal, siendo mucho más tóxicos los primeros debido a su exposición fatídica a pesticidas, aire polucionado y asqueroso barro lleno de insectos y de larvas. Los alimentos de origen animal, empero, solamente engordan, crean impotencia e infartos de miocardio.<br /><br /><strong>Alma.</strong> Lo divino que hay en cada uno de los seres humanos, es decir, poca cosa. A lo largo de la historia, diferentes teólogos y demás morralla han intentado ubicar el alma en algún órgano del ser humano, sin éxito. No me quiero imaginar el jaleo burocrático cósmico que se puede montar con los actuales trasplantes.<br /><br /><strong>América.</strong> El llamado Nuevo Continente, ya que llegó tarde a este plano existencial. Poblado por descendientes de colonos, esclavos de lejanas tierras y descendientes de los nativos americanos originales, es decir, poca cosa. Si un americano es de Estados Unidos, sólo tiene que decir que es americano. Si es de otro país, deberá especificar.<br /><br /><strong>Anillo.</strong> Objeto mágico de poder, utilizado por las mujeres a lo largo de toda la historia de la humanidad con el propósito de gobernar a todos los hombres, encontrarlos, atraerlos y atarlos en las tinieblas.<br /><br /><strong>Año.</strong> Cómputo de tiempo gracias al cual usted tiene trescientos sesenta y cinco días para poder ser igual de infeliz, señora.<br /><br /><br /><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-71792869828852019762010-11-19T20:24:00.003+01:002010-11-19T20:39:23.719+01:00Diccionario huero (pequeña muestra de la A)<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEivqc0ctEfImXugOomK5XFa4qGTKyuRxDM-bf7p0K3LfA2cQAI4isOm67F-1fzkAWjlD_dyxQdzIgb9jbZHSzKl5_rBk5wHG7FsvLVWGP6L695YGi5BNlUpZ5swd9SBWGD0mcky/s1600/abc.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5541345283000928466" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 181px; CURSOR: hand; HEIGHT: 119px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEivqc0ctEfImXugOomK5XFa4qGTKyuRxDM-bf7p0K3LfA2cQAI4isOm67F-1fzkAWjlD_dyxQdzIgb9jbZHSzKl5_rBk5wHG7FsvLVWGP6L695YGi5BNlUpZ5swd9SBWGD0mcky/s320/abc.jpg" border="0" /></a><br /><div>Buenas tardes, seguidores nimios... </div><br /><div>Estoy escribiendo una obra que, quizá, me lleve toda la vida (o una pequeña parte de ella, lo que venga primero): un diccionario escéptico, pedante y cínico... Os dejo una pequeña muestra de lo que llevo hasta ahora:</div><br /><br /><br /><div></div><strong>Abadía.</strong> Especie de cárcel o centro de reclusión, pero sin tabaco, señora. Ciertos hombres supuestamente sabios (y ociosos) acuden a estos lugares para encontrarse espiritualmente con su deidad favorita. Se les castiga sin sexo hasta que lo consiguen.<br /><br /><strong>Abdomen.</strong> Zona del cuerpo susceptible de doler después de una borrachera. Algunos pueblos antiguos veneraban el abdomen y lo consideraban el centro espiritual del ser humano. El caso más significativo es el de la tribu de Cast-Ul-Abderá, un pueblo nómada del lejano oriente. Después de la Hégira, empero, los preceptos del profeta prohibieron su culto por considerarlo sacrílego. Los descendientes de los cast-ul-abderitas siguen, en cierto modo, respetando sus tradiciones ancestrales; por ejemplo, premiando con un quilo de chuletas de cordero a todo aquel extranjero que libere una ventosidad en su presencia.<br /><br /><strong>Abogado.</strong> Uno de los siete demonios del infierno hebreo. Su trabajo consistía en cobrar enormes salarios a sus víctimas a cambio de defenderles de otros demonios que jamás les atacaron. Según el antiguo testamento, el pueblo hebreo gustaba de regalar estas criaturas infernales a sus vecinos. De hecho, la destrucción de Troya se debe a una mala gestión del abogado de Héctor. Dicho abogado fue un presente judío al hijo del rey de Troya. Por ello es famosa la expresión <em>“Timeo hebraeus et dona ferentes”.</em><br /><br /><strong>Aceite.</strong> Sustancia oleaginosa producida por determinados esfínteres humanos y que se usa en la cocina.<br /><br /><strong>Acertijo.</strong> Especie de cábala mediante la cual el gobierno de turno calcula los presupuestos generales del estado.<br /><br /><strong>Acné.</strong> Erupción cutánea purulenta, generalmente acompañada de intenso prurito. En la antigüedad se creía que se debía a una acumulación sebácea en la epidermis por el cambio hormonal que suele venir parejo a la adolescencia. Hoy, empero, sabemos que la causa de su aparición es la compulsión onanista propia de la edad de los que la sufren.<br /><br /><strong>Adicción.</strong> Imposibilidad física, psíquica o espiritual de abandonar cualquier tipo de vicio. Por ejemplo, la lectura de este único y verdadero diccionario. Las adicciones han sido una constante a lo largo de toda la historia de la humanidad. Ya el célebre orador romano Cicerón, en sus famosas y senatoriales catilinarias, le recriminaba a éste el que aún no le hubiera devuelto el dinero prestado para poder acudir presto a una casa de juegos de Roma. De ahí que la primera frase que pronunciara en la sesión plenaria fuera <em>“Quo usque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?”.</em><br /><br /><strong>ADN.</strong> También conocido entre sus amigos como ácido desoxirribonucleico. El ADN contiene la información genética de usted, de mí, y de su vecino, señora. También sirve como desatascador cuando alguna religión se atranca en la garganta.<br /><br /><strong>Adulto.</strong> Insufrible mutación bastante común en los seres humanos. Se caracteriza por su tamaño desproporcionado, estar cubierto de pelo, oler mal, comer como un cerdo y ser propenso a resfriados (por asimilar fluidos ajenos), a regoldar y a no tener sentido del humor. Los adultos se agrupan en sectas donde pervierten a los jóvenes y les instan a ser como ellos, es decir, una panda de sosos integracionistas. Les encanta no dejar hablar a nadie y fardar de vehículo propio. Al final de sus vidas suelen arrepentirse y volver a una lastimera fase larvaria.<br /><br /><strong>Aeropuerto.</strong> Lugar donde la gente toma un avión para ir a otro sitio igual de horrible que el propio.<br /><br /><strong>Agosto.</strong> Octavo mes del año en los países decentes. Fue impuesto por el emperador Augusto, magno sobrino de Julio César, para darles un mes de veraneo en las costas de Hispania a los ajetreados romanos. Los pícaros iberos les ofrendaban con viandas caducadas (<em>paelhum</em>) y con matarratas líquido (<em>sangrium peleonum</em>).<br /><br /><strong>Ajedrez.</strong> Complicado rompecabezas sin sentido alguno, cuyas reglas varían según los jugadores. Las personas que disfrutan de este intrascendente entretenimiento suelen mortificar a sus conocidos intentando que éstos participen en su juego, aunque sea como espectadores. Célebre es el caso del conde de Monpetitcanaillè, que prefirió ser sodomizado por su sirviente senegalés y por un coro de mariachis antes que volver a asistir como público a una sesión de ajedrez organizada por algún depravado de sus amigos.<br /><br /><strong>Alcalde.</strong> Jefe de una congregación municipal de ladrones, y que posee las llaves de la caja fuerte. El alcalde es la cabeza visible del entramado mafioso que impera en pueblos y ciudades. Son elegidos de forma democrática por los habitantes de las poblaciones, los cuales pueden elegir entre dos o tres ladrones diferentes con total libertad.<br /><br /><strong>Alcohol.</strong> Bebida infantil de gran popularidad entre la población adulta, aunque se sabe que causa trastornos bipolares en los mayores de dieciocho años. En los niños, empero, el alcohol es totalmente inofensivo, y su consumo prolongado aumenta las expectativas de que éstos no lleguen a convertirse jamás en adultos. Su uso está extendido por todo el orbe y se consume desde el principio de los tiempos. Según un evangelio apócrifo, la primera alcohólica fue Eva, al comerse una manzana fermentada que se cayó del árbol prohibido. Quizá fue esa la razón por la que la primera mujer fue expulsada del paraíso.<br /><br /><br /><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-57171452398265687742010-11-07T00:09:00.002+01:002010-11-07T00:10:56.394+01:00A propósito de...Francisco Umbral.<span xmlns=""><p style="TEXT-ALIGN: justify">Descubrí a Umbral como autor literario y no sólo como columnista a través de <em>Mortal y rosa</em>. Creo que calificarla como una de las mejores obras de prosa poética de los últimos 30 años no es una exageración. A los que somos de mi generación (de las siguientes no hablo porque me da miedo), Umbral nos llegó como aquel señor de voz cavernosa y con aspecto de <em>dandy </em>venido a menos que sólo quería hablar de su libro en un programa que presentaba la gran hermana Mercedes Milá. Nunca me cayó mal ese señor (sería que aquello de cantarle las cuarenta a la Milá me gustaba), pero no me decidí a leer nada suyo hasta hace unos pocos años.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify"><em>Mortal y rosa</em> fue escrita por Umbral tras la muerte de su hijo de seis años. Como todas las novelas de amor, porque Mortal y rosa, si es que puede ser clasificada de algún modo, sería como novela de amor, nace de un conflicto. Alguien dijo alguna vez que la historia de amor feliz no es literaria. Todas las buenas obras literarias que han tratado sobre el amor lo han hecho siempre desde el conflicto: con uno mismo, con los demás (estas son las más frecuentes) o incluso con Dios. En el caso de Mortal y rosa ese conflicto es la muerte, o más bien cómo soportar la muerte en vida. Así pues el amor llena la novela, o el diario, o lo que quiera que sea esta obra. Si alguien nunca ha leído a Umbral, que respire hondo, aleje sus prejuicios y lea estas líneas:<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">"<span style="font-family:Verdana;color:#333333;">Sólo encontré una verdad en la vida, hijo, y eras tú. Sólo encontré una verdad en la vida y la he perdido. Vivo de llorarte en la noche con lágrimas que queman la oscuridad. Soldadito rubio que mandaba en el mundo, te perdí para siempre. Tus ojos cuajaban el azul del cielo. Tu pelo doraba la calidad del día. Lo que queda después de ti, hijo, es un universo fluctuante, sin consistencia, como dicen que es Júpiter, una vaguedad nauseabunda de veranos e inviernos, una promiscuidad de sol y sexo, de tiempo y muerte, a través de todo lo cual vago solamente porque desconozco el gesto que hay que hacer para morirse. Si no, haría ese gesto y nada más. Qué estúpida la plenitud del día. ¿A quién engaña este cielo azul, este mediodía con risas? ¿Para quién se ha urdido esta inmensa mentira de meses soleados y campos verdes? ¿Por qué este vano rodeo de la muerte por las costas de la primavera? El sol es sórdido y el día resplandece de puro inútil, alumbra de puro vacío, y en el cabeceo del mundo bajo un viento banal sólo veo la obcecación vegetal de la vida, su torpeza de planta ciega. El universo se rige siempre por la persistencia, nunca por la inteligencia. No tiene otra ley que la persistencia. Sólo el tedio mueve las nubes en el cielo y las olas en el mar."<br /></span></p><p style="TEXT-ALIGN: justify"><span style="color:#333333;">He vuelto a Umbral con "Un ser de lejanías", que publicó en el año 2001. Muchos de los temas de <em>Mortal y rosa</em> se encuentran también en este diario íntimo (no sé denominarlo de otro modo), en el que Umbral, ya de vuelta de todo, arremete contra la literatura como negocio, aunque se sabe parte de él. Escribe sobre mujeres, reales o imaginarias, qué más da si eso permite que deje algunas de esas metáforas que le hicieron famoso. Y habla sobre literatura (Cela, Borges o Juan Ramón recorren algunas páginas), y sobre todo una desidia que no hace recomendable la lectura de la obra a aquel que esté pasando una mala racha. Sin embargo, he descubierto una afinidad con Umbral, que me ha sorprendido y que, de hecho, ha incrementado mi estima por él, y que tiene que ver con su repulsa por lo que él llama "el asunto" y que no es otra cosa que la trama o el argumento en las novelas. Y lo defiende de este modo que me parece genial:<br /></span></p><p style="TEXT-ALIGN: justify"><span style="font-family:Verdana;color:#333333;">"El punto terminal y glorioso del arte es pintar la pintura – abstracto - musicar la música, escribir la escritura. Prescindir del tema/soporte, en fin. Las meninas y las tres gracias y los apóstoles del Greco no son más que un soporte para hacer pintura, Ana Karenina es un soporte, y Madame Bovary y Carlos V y las señoritas de Aviñón. Las tormentas de Beethoven y las óperas de Wagner son soportes para hacer música. El David de Donatello es una disculpa, un motivo para jugar con las formas. El gótico es una época y el barroco es una constante, una tendencia, un eón. Pero ambos estilos se justifican en sí mismos. Dios es un soporte para hacer catedrales. El dólar es un soporte para hacer rascacielos."<br /></span></p><p style="TEXT-ALIGN: justify"> </p></span>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-78340518385960695322010-11-03T12:50:00.002+01:002010-11-03T17:51:13.933+01:00A propósito de...Georges Perec.<span xmlns=""><p style="TEXT-ALIGN: justify">Hablar de Geroges Perec es conducir la mirada hacia los límites de la creación. Y, aunque esta parezca una frase hecha, nada más lejos de la realidad. Su literatura es un continuo moverse entre límites, imponiendo restricciones a la creación pero, paradójicamente, para impulsarla a zonas antes inexploradas. No es, de hecho, Perec, un autor convencional. Aunque contaba historias no se le puede considerar un narrador. Ni falta que hace. Entendía la literatura desde la vertiente más creativa de la misma, desde esa que explora el lenguaje, juega con él y nos lo devuelve empaquetado de un modo que nunca antes habíamos visto. Te presenta además, como su amigo Raymond Queneau en Ejercicios de estilo, todas las variantes posibles (siempre abiertas, claro, a la intervención del lector) de una misma situación o personajes.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Por algún motivo que desconozco Perec no es muy conocido entre el público general, no relacionado con la literatura. Y a pesar de eso se ha traducido gran parte de su obra al español, lo que denota interés por ella, aunque tal vez sea sólo capricho de los traductores, que ven en dichas traducciones un reto intelectual. Posiblemente el mayor de ellos sea traducir <em>La disaparition</em> (El secuestro, en nuestro caso), novela en la que Perec no emplea jamás la letra e, la más común en la lengua francesa. En España, los traductores decidieron no emplear la letra a, jugando así con esos límites impuestos por Perec. En otros casos, sin embargo, no es posible tal traducción, como en El Gran Palíndromo (<a href="http://www.ed4web.collegeem.qc.ca/prof/rthomas/textes/palingp.htm">http://www.ed4web.collegeem.qc.ca/prof/rthomas/textes/palingp.htm</a>) , que consta de unas 1300 palabras.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Hay obras de Perec, de esas que suelen denominarse inclasificables, como Especies de Espacios (uno de esos libros a los que vuelvo una y otra vez), en los que Perec intenta agotar todas las denominaciones de espacio, desde los más minúsculos a los que la vista no abraca, incluyendo los espacios virtuales, como aquellos definidos por las líneas geográficas de los mapas. Otro de esos libros es Pensar, clasificar, un conjunto de textos, donde Perec juega con las listas, la variaciones sobre esas listas y las descripciones minuciosas de objetos, al modo de la nouveau roman, pero sin tanta parafernalia postmoderna. Se puede uno perder también en <em>Me acuerdo</em>, una suerte de agenda donde Perec intenta apuntar todas aquellas cosas que recuerda (esta es posiblemente la peor de las limitaciones, la de la memoria). En los tres últimos años, más o menos, se han publicado otras cuatro obras entre las que se encuentran Un hombre que duerme (esta es una reedición, puesto que ya la publicó Anagrama hace algunos años) y en la que la desidia parece ahogar al personaje, que se niega a inmuscuirse en la actividad de la vida. Desea sólo dejarse llevar. Este es un breve fragmento de la misma:<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify"><span style="color:black;"><em>"Más tarde, llega el día del examen y no te levantas. No es un gesto premeditado, no es un gesto siquiera, sino una ausencia de gesto, un gesto que no realizas, gestos que evitas realizar. Te acostaste temprano, has dormido plácidamente, habías puesto el despertador, lo has oído sonar, has esperado a que sonara, durante varios minutos por los menos, ya despierto por el calor, o por la luz, o por el ruido de los lecheros, de los basureros, o por la espera. Tu despertador suena, tú no te mueves en absoluto, te quedas en la cama, vuelves a cerrar los ojos. Otros despertadores comienzan a sonar en las habitaciones contiguas. Oyes ruidos de agua, de puertas que se cierran, de pasos que se precipitan por las escaleras. La rue Saint-Honoré comienza a llenarse de ruidos de coches, chirridos de neumáticos, cambios de marchas, breves sonidos de bocina. Los postigos golpean, los comerciantes levantan sus persianas metálicas. Tú no te mueves. No te moverás. Otro, un sosia, un doble fantasmagórico y meticuloso hace, quizá, en tu lugar, uno a uno, los gestos que tú ya no haces: se levanta, se lava, se afeita, se viste, se va."</em></span><br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Hace tan sólo unos meses se publicó El aumento. En esta obra, la restricción viene impuesta por el esquema de la obra. Se trata de agotar todas las posibilidades que se pueden plantear cuando un individuo va a pedir un aumento de sueldo a su jefe, y como esquema de la obra se presenta uno de esos esquemas de evaluación de opciones en los que a partir de una misma opción existen varias posibilidades de acción. Hay muchas otras obras de Perec, con restricciones interesantes, como <em>Qué pequeño ciclomotor de manillar cromado en fondo de patio, Lo infraordinario </em>o <em>El gabinete de un aficionado</em>.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Pero queda hablar de las grandes obras de Perec que, a mi juicio, son Las cosas y La vida: instrucciones de uso.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Las cosas fue su primera novela. En ella ya se ve perciben algunos de los rasgos que definirás después a Perec, sobre todo su gusto por las enumeraciones. Éstas no son casuales, una mera exposición de sustantivos en orden, sino que definen a los personajes pues su posesión les define de algún modo, pues son extensiones más allá de sus cuerpos. Las relaciones entre los personajes de esta novela se establecen, de hecho, a través de dichos objetos. Y además la obra comienza empleando un tiempo condicional, algo que nunca había visto el comienzo de una novela.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Pero su gran obra es, sin duda, La vida: instrucciones de uso. Aquí se dan cita todos los Perec posibles. Definir la trama no es posible, aunque a grandes rasgos, trata acerca de la vida de los inquilinos de un edificio de pisos (de todos ellos) aunque con especial énfasis en alguno de ellos, como un millonario que decide llevar a cabo la obra de su vida que consistirá en viajar a diversos países donde pintará un determinado paisaje. Después ordenará realizar puzles con esos paisajes para finalmente reconstruirlos y destruirlos, para que no quede nada de su obra al morir. Pero este argumento e sólo para aquellos que deseen ver una historia. El resto pueden disfrutar con la cantidad de voces posibles que hay en la novela, con las inmensas descripciones y listas de objetos que aparecen en la misma (recuerdo perfectamente una acerca de las herramientas de una ferretería) y en el camino se mezclan historias de misterio, algún amor y sobre todo muy buena literatura. Y, por supuesto, la estructura formal de la novela no podía ser sencilla. La mirada viene determinada por el movimiento del caballo en el ajedrez.<br /></p><p style="TEXT-ALIGN: justify">Me dejo por el camino muchas otras virtudes de este autor, que es posiblemente uno de mis cinco preferidos (no me atrevo a nombrar a los otros cuatro para no dejar a ninguno fuera). No creo que haya existido nunca un autor tan creativo como Perec, que haya aportado tanto a la estructura formal y a los juegos con el lenguaje. Con Perec hay que olvidarse de la trama y perderse en el fondo de la literatura, que no es sólo narración sino también, y sobre todo, búsqueda de nuevas formas empleando el material de este arte, que es la palabra. </p></span>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-33567461330572612192010-11-02T12:23:00.004+01:002010-11-02T12:27:30.219+01:00El Otro.<div align="justify">I<br /><br />Debo a mi obstinada curiosidad la conciencia de existencia del Otro y de los ladrones de libros. Todo comenzó en la librería de Garay, que visitaba una vez al mes en busca de libros y conversaciones (ambos eran escasos en mi vida o, tal vez, nunca suficientes). Habitualmente era yo quien elegía los títulos que me llevaba a casa (los llevaba pulcramente anotados en una página minúscula de una libreta) pero Garay se permitía aconsejarme algún título que yo no había escuchado antes ni por asomo. Esta vez le pedí un Tratado sobre los espejos de Hutchinson y una novela inmemorable de un amigo escritor del que no desvelaré su nombre por cierto sentido del decoro que aún me empuja a la corrección política. Garay se permitió recomendarme una novela y para ello empleó un tono críptico que no era habitual en él.<br />-El Otro- me dijo- contiene todo aquello sobre lo que siempre has querido escribir. Lo descubrí la semana pasada y sé que te puede interesar.<br />Me acercó el libro y lo dejó sobre el mostrador. Lo cogí casi sin mirarlo. Tan sólo vislumbré el color bermejo de la cubierta con letras mayúsculas en negro anunciando el nombre del autor y el título de la obra:<br /><br />EL OTRO<br /><br />Por Rómulo Gea.<br /><br />Lo guardé en la bolsa con el resto de adquisiciones. Pagué a Garay y le prometí volver el mes siguiente con mi opinión sobre la novela. Me instó a que la leyera lo antes posible. Te interesará, sin duda, repitió.<br />Me marché a casa y dejé los libros sobre la mesa del despacho. Nunca he sido un lector impaciente. Impetuoso sí, pero no impaciente. Me gusta dejar reposar las nuevas adquisiciones en casa, percibir cómo se impregnan del olor y el polvo del despacho y, pasado un tiempo, deleitarme en su lectura sintiéndolos como algo propio desde la lectura de la primera página. De este modo procedí con mis nuevas adquisiciones.<br />Una semana después sonó el teléfono. Era Garay:<br />-¿Leíste la novela que te recomendé?<br />-Ni siquiera la he abierto.<br />-Deberías leerla- volvió a emplear su tono críptico.<br />-¿Por qué tanto interés en la novela?- inquirí.<br />-Deberías leerla.<br />Colgó.<br />He de confesar que consiguió intrigarme. Fue más su insistencia en que leyera la novela que su tono artificialmente críptico. Decidí por tanto obviar el ritual al que sometía a mis libros. Recogí de la pila de libros el que Garay me había recomendado, me senté con aplomo en mi sillón de orejas y comencé a leer.<br /><br />II<br /><br />La lectura del libro me indignó y me aterró simultáneamente. A decir verdad, no sabía por cual de los dos estados decidirme. Al leer la primera oración del libro comprendí dos cosas: a) no necesitaba leer lo que restaba de la obra (aunque lo haría) y b) el interés de Garay por que leyese la novela estaba de sobra justificado. Proseguí la lectura, que me llevó unas tres horas. Decidí descansar. Bajé a cenar a un restaurante cercano, consumí una cena abundante y la regué con un excelente vino que me embriagó de inmediato. Sin duda necesitaba encontrarme en aquel estado. Regresé a casa y me preparé un whisky con hielo bien cargado. Dejé el vaso sobre la mesa del despacho y de una estantería saqué con cuidado una carpeta antigua que contenía unas cuartillas escritas por mí mismo hacía no menos de un año. Recogí la novela del salón y me senté en el escritorio.<br />Siempre he pensado que el silencio preludia los momentos cruciales de nuestras vidas. Aquel fue también un instante silencioso. Me disponía a cotejar aquellas obra que Garay me había recomendado con unas cuartillas escritas por mí hacía más de un año, sabiendo de antemano que los textos que contenían novela y cuartillas eran similares, si no idénticos.<br />Reinicié una lectura detenida de la novela tomando algunas notas. Analicé su estilo, sus personajes, sus giros argumentales, su sintaxis. Finalicé el análisis del primer capítulo de la novela y me arrojé sobre mis cuartillas. No había duda: allí estaban el mismo estilo, los mismos personajes, los mismos giros argumentales, la misma sintaxis, todos ellos como imágenes especulares de la novela de Rómulo Gea. Volvió la disyuntiva entre la indignación o el terror:<br />-Indignación: si la novela era una copia de mis cuartillas.<br />-Terror: si la novela <em>no</em> era una copia de mis cuartillas.<br />Decidí postergar el cotejo del resto del libro, con el convencimiento de que no encontraría diferencias sustanciales con respecto a lo analizado.<br />Pese a que esperaba que el insomnio no me dejase pegar ojo, dormí profundamente. No soñé.<br /><br />III<br /><br />Me desperté repuesto y ansioso por comenzar a trabajar. Pasé la mañana comparando la novela con las cuartillas. Eran, sin duda, la misma obra, aunque con leves modificaciones. He de reconocer (esto es penoso para un autor) que la novela de Rómulo Gea era superior a la que yo había proyectado. Parecía que mis cuartillas hubiesen sido sometidas a una tarea correctora que mejoraba notablemente lo que yo había escrito. Pero había algo más en aquellas correcciones. Yo hubiese suscrito todas y cada una de ellas. Había en la novela de Rómulo Gea (¿o era mía, o de ambos?) un ineludible olor a mí mismo incluso en las correcciones del texto que yo aún no había acometido. Era esa pre-visión, ese adelantamiento a mis intenciones lo que contribuía a al convencimiento de que la novela de Rómulo Gea era una creación atroz. La indignación, sin embargo, aún ocupaba una parte importante entre mis sentimientos encontrados.<br />La posibilidad de que alguien hubiese copiado mi novela era la que mantenía mi indignación latente. Pero era esa una posibilidad muy remota. Yo no había desvelado jamás el argumento de mi novela. Ni siquiera había señalado a nadie la mera existencia de aquellas cuartillas. Tan sólo declaré en un par de ocasiones la intención de escribir. Nunca las mostré. Las visitas a mi casa, muy esporádicas, y por lo normal femeninas, no estaban relacionadas con el mundo literario, por lo que tenía la seguridad de que el descubrimiento accidental de mis cuartillas por parte de alguna de aquellas visitas no hubiese despertado el más leve deseo de hurtarlas o, mucho menos, de imitarlas.<br />Cuando analizaba la situación desde este punto de vista descubría que las posibilidades de que alguien hubiese copiado mi novela eran casi nulas. Pero entonces dejaba el camino libre a mi imaginación para postular decenas de hipótesis a cual más disparatada y fantástica:<br />1.Yo estaba soñando y lo que vivía no eran más que alucinaciones de un cerebro que vivía en su eterno opuesto. Esta era a todas luces la menos original (recordaba a aquél cuento del chino y la mariposa) y acaso la menos verosímil de las hipótesis.<br />2. Existía un doble de mí mismo que vivía y escribía como yo pero con unos meses de adelanto (las correcciones a mi texto así lo sugerían). No pude evitar, a continuación, fantasear con la posibilidad de un encuentro con mi doble, las posibilidades literarias que ello ofrecía y las consecuencias físicas que podría ocasionar ese encuentro.<br />3. Mis cuartillas no eran más que una burda copia de la novela de Rómulo Gea y era yo el inconsciente impostor y no él. La verosimilitud de esta hipótesis se me antojaba nula, a no ser que fuese presentada en combinación con la hipótesis número 1.<br />4. Se trataba de una broma de alguien que había tenido acceso a mis cuartillas, que había realizado una copia de las mismas, las había corregido y se había permitido publicarlas. Esta hipótesis se me tornaba como la más realista (sin duda) y sin embargo mi intuición la negaba de forma rotunda.<br />5. Cabía la existencia (llegados a este punto mi imaginación ya era inagotable) de universos paralelos en los que yo hubiese finalizado mi novela y ésta hubiese llegado a mis manos a través de alguna grieta temporal que mi sosias habría aprovechado para jugarme una mala pasada (no podía descartar esta opción sabiendo lo perverso que tiendo a ser conmigo mismo).<br />6. Alguien podría haberme escuchado hablar en sueños sobre mi novela y después haberla hurtado de mi despacho o haber realizado el esfuerzo menardiano de tratar de escribirla, suplantándome en el estilo y las ideas e incluso en las correcciones aún no realizadas (hipótesis descabellada, es cierto, pero nacida de la desesperación).<br />7. Yo mismo había escrito la novela y no lo recordaba (esta posibilidad me intrigaba especialmente). Pero, ¿por qué publicar la novela con pseudónimo? A no ser que yo fuese Rómulo Gea y no quien creía ser.<br />8. Podían existir combinaciones de las hipótesis anteriores que complicasen (¡más aún!) la explicación de las novelas duplicadas.<br />9. Ninguna de las posibilidades anteriores (agotadas mi inventiva y mi modestia esta me parecía la más fantástica de las hipótesis).<br /><em><br />(continuará)</em></div>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-24667980498491058502010-10-28T14:39:00.001+02:002010-10-28T14:41:03.332+02:00A veces opino lo mismo.<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJ3UJ-cXBXVL8MMkvKpphXBFZ_ty2f5VJfSJpqFedgYLiQzrauclb8UqHuF4-yOwSxMTorPVIUt9k_TLEJ4JL2s5FXgZySHI8y1xnGPcaNv9ibj4x4POgotZTdSOhVULE8m2yG/s1600/1131361906_28801a92cb.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5533075963322403314" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 379px; CURSOR: hand; HEIGHT: 236px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgJ3UJ-cXBXVL8MMkvKpphXBFZ_ty2f5VJfSJpqFedgYLiQzrauclb8UqHuF4-yOwSxMTorPVIUt9k_TLEJ4JL2s5FXgZySHI8y1xnGPcaNv9ibj4x4POgotZTdSOhVULE8m2yG/s400/1131361906_28801a92cb.jpg" border="0" /></a><br /><div></div>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-63994395988097176002010-10-25T13:41:00.002+02:002010-10-25T13:54:00.545+02:00Justicia.<div align="justify">Para ti es fácil. Te sientas. Esperas. Decides. Tú eres quien antecede a las consecuencias. Si decides dar tu consentimiento entonces nos vamos a la cama y, con suerte, si ese día tengo la inspiración atlética pasas un buen rato, mientras que para mí es un sueño, como una hazaña. No sabes lo que es esto. Tenerte delante, sentirte como algo intocable, un trofeo o una final de un campeonato, o algo así, y yo el insignificante bicho al que puedes aplastar con un parpadeo. En ocasiones he pensado que es suficiente con que no me mires con desagrado. Yo me siento y lo único que intento es no parecer un estúpido. Me fumo dos o tres cigarros y me bebo un par de cafés, pero lo único que hago durante todo ese tiempo es sentirme un estúpido. Lo único que intento es no parecerlo, o al menos, que no notes que me siento como tal. Jugamos diferentes juegos. Para mí es ya un hito el poder sentarme frente a ti con un café y dirigirte siquiera la palabra. Mientras tanto tengo la certeza de sentirme inferior a ti en todo. Pero no te alarmes porque eso no es malo, es sólo la constatación subjetiva de que eres tú quien tomas las decisiones. Ante las mujeres bonitas,...,déjame terminar, ante las mujeres bonitas no sé qué decir, parezco un imbécil que no encuentra su momento, que sólo dice palabras inconexas, sin sentido. Me intimidas, me haces sentir una cosa inservible que sólo puede aspirar a oler tu perfume. Lo haces de forma inconsciente pero eso no evita que yo me sienta así, que muchos otros se sientan así. Te parecerá que es el discurso de un perdedor, de alguien que tiene la estima a la altura de las colillas que pisa. Y aciertas. En realidad, si te soy sincero, es más fácil ser así. Es más seguro. Es la única forma de evitar frustraciones. Las ilusiones, a la larga, sólo crean insatisfacción. Y no es verdad que el no tener ilusiones haga que la vida valga menos. En mi caso, La Odisea vale más que unos cuantos polvos con una rubia. Mucho más. Y, ¿sabes otra cosa, ahora que por fin escupo esto? El sentirme un estúpido al hablar contigo me hace ser ateo. No necesito plantearme cuestiones científico-teológicas ni dejarme la vida en silogismos. Es sólo que el mundo no es justo, ergo Dios no existe, o al menos, no ese Dios bondadoso y justo que defienden los cristianos de buen corazón. Los niños que mueren de hambre, o los muertos inocentes en las guerras, o las mujeres violada. Esas son injusticias, pero son ese tipo de injusticias que están bien vistas, las que producen compasión, las que son políticamente correctas. Pero no se percibe como injusticia que yo me sienta estúpido hablando delante de ti, que lo único que pueda hacer es sentarme delante, mirarte un rato, despedirme de ti y hacerme una paja esta noche rememorando esta media hora, una hora a lo sumo. No pongas esa cara, en el fondo lo sabes, pero tampoco puedes hacer nada por evitarlo. No te aflijas por ello. Porque, mientras tanto, otros van por el mundo quitándose a mujeres como tú de encima, como si fuerais juguetes inservibles. Eso es lo que hace injusto este mundo. Si al menos todos nos sintiésemos igual de estúpidos. Pero no. El problema es que así seguiremos siempre. Tú me harás caso ahora durante un rato, quizá toda la noche, pero al final, en una semana o un mes te irás con el rubio que conociste la otra noche porque yo te aburriré con esta mentalidad perdedora que se resigna a las injusticias. Y tarde o temprano, te darás cuenta de ello, por lo que pretendo ahorrarte los pasos intermedios, para permitir que nuestras vidas sigan como hasta ahora, sin golpes bruscos, dejándose llevar por esto que hemos creado entre todos. En el fondo, sabes que tienen que existir tipos como yo para existan mujeres como tú. De un modo un tanto extraño nos necesitamos para desempeñar nuestros papeles Es algo inexorable. Y, por eso, lo mejor es aceptarlo. Cuanto antes mejor, sin excusas. Y dedicarse a otra cosa, a vivir, sin volver la vista atrás porque si no estás perdido. Por eso no te puedo decir que te quiero, que me quiero acostar contigo. Digamos que sería lo políticamente correcto que lo dijese y que se cumplieran los finales felices de las películas en las que el marginado se tira al final a la modelo, pero no sería justo detener así el devenir lógico las cosas. En el fondo, todo seguirá estando como está. Pero no, tú te empeñas. Al final me dirás que tenemos una buena relación y que preferirías seguir como antes, cuando nos veíamos para tomar un café y hablar un rato. Por eso no quiero acostarme contigo, porque no cambiaría nada, tal vez contribuiríamos a crear más entropía en el universo, como si no hubiese ya suficiente. A los dos días te cansarás de mí y yo seguiré siendo este energúmeno que sólo queda contigo para flagelarse, como si necesitase esta penitencia semanal. Y tal vez sea así. Desde un punto de vista un poco retorcido eres como esa muela que duele un poco y por la que uno se pasa lentamente la lengua, sintiendo un pequeño dolor agradable, suficiente, sin llegar a lo insano, pero agradeciendo ese pequeño sufrimiento. Irme contigo a la cama sería romper con eso, sería darme la oportunidad de volver a la ilusión y, por tanto, al desengaño posterior porque sabes, como yo, que lo habrá. Pero si aún sigues queriendo que nos acostemos, vamos pues. Demostrarás que no has entendido nada de lo que te he dicho...o tal vez todo. </div>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-26756712523056036102010-10-19T13:05:00.000+02:002010-10-19T13:06:09.246+02:00Tiempo.<div align="justify">No soy ya el que fui, ni seré el que soy. Cuando fui, te amé de forma inconsciente y utópica desde una intuición amorosa y un desconocimiento de tu existencia que me acompañaron en cada uno de mis sucesivos yoes. Cuando soy, te amo desde lo que conozco, desde mi memoria y la tuya y la conciencia de tenerte aquí, delante, amándome como te amo yo a ti, compartiendo el hoy. Cuando soy intento ser otro para vernos desde fuera y salir del embelesamiento de lo definitivo. Cuando sea, te amaré del mismo modo que lo hice cuando tomé conciencia de lo que era el amor, cuando tu implacable idea se asentó en mí para no escapar más, cuando tu mano se posó por primera vez sobre la mía.<br /><br />Venzo así al tiempo con la eternidad, pues es tal vez la única forma de hacerlo. </div>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-54600807555867913752010-10-13T22:49:00.003+02:002010-10-13T22:54:25.320+02:00Por ésto me gusta la ciencia y soy ateo.Si un día veo a un cura hacer lo que han hecho estos me quito el sobrero:<br /><br /><a href="http://www.nature.com/nature/journal/v467/n7317/full/nature09474.html">http://www.nature.com/nature/journal/v467/n7317/full/nature09474.html</a><br /><br />Para los que no sepan inglés sólo decir que tres de los cuatro autores se retractan de lo publicado en la revista Nature porque no se fían de los datos que publicaron en su día, incluso a pesar de no poder poner en sus respectivos CVs que han publicado ese trabajo en Nature, que para un científico es como para un jugador de fútbol decir que ha jugado una final de una copa de Europa.<br /><br />Pues nada, ahí queda eso.<br /><br />Y los dogmas, dogmas son.Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-84975970068293733852010-10-12T16:46:00.000+02:002010-10-12T16:47:09.078+02:00A propósito de...la literatura francesa.<div align="justify">Francia no ha parido a ningún genio literario a la altura de Cervantes, Dante o Shakespeare pero ha dado lugar, sin duda, al mayor grupo de escritores de talento. Entre ellos están gente tan dispar como Rabelais, Pascal, Voltaire, Proust, Balzac, Zola, Apollinaire, Mallarmé, Hugo, Dumas, Verlaine, Rimbaud, Verne, Roussell, Jarry, Robbe-Grillet, Queneau, Perec, Duras, Quignard, Mondiano y muchos otros que no cito. No creo que exista una lista tan extensa de escritores con talento en la literatura de otro país (España podría aproximarse en según qué épocas, pero presenta lagunas, a veces muy prolongadas). Las causas de esa acumulación de talentos me son por completo ajenas. Es verdad que la cultura francesa siempre se ha distinguido del resto. Crearon la Ilustración y le cortaron la cabeza a un rey y para mí eso ya es suficiente. Se alejaron de otros movimientos, como del romanticismo que surgió precisamente en oposición al anterior y que, para mi gusto, dio lugar a muchos más escritores malos que buenos (sí, es verdad, como en todas las épocas, pero en esta esa especialmente, aunque no daré nombres para no herir susceptibilidades). </div><div align="justify"><br /><br />Los franceses han tenido casi siempre una conciencia social que otros países no han tenido o, al menos, no han sabido expresar convenientemente. Lo más parecido a Balzac o Zola que se me ocurre es Clarín o Pérez Galdós y, con todos los respetos, creo que no se acercan a ellos, a pesar de ser dos buenos escritores. Al fin y al cabo, un pueblo que se atreve a pasar por la guillotina a un rey, no es mal pueblo. Ya nos hubiese venido bien a nosotros pasar a más de uno por la guillotina, rey o valido.<br /><br />Los franceses, sobre todo en el siglo XX estuvieron siempre en el límite de la vanguardia. Fueron casi siempre pioneros. Surgieron otros movimientos, los beatnik, los cambios en la novela introducidos por Joyce o Kafka o el boom latinoamericano, pero incluso algunos de ellos se gestaron más en Francia que en sus propios países o culturas de origen. Francia siempre ha atraído a los intelectuales. Se dan allí las condiciones para que surjan las vanguardias. ¿Cuáles son esas condiciones? Me gustaría saberlas. Creo que a veces es simplemente producto de juntar a mucha gente con talento bajo un mismo techo. Y así surgieron el modernismo (aunque este movimiento creo que es, seamos justos, mucho más amplio), el surrealismo (ese sí, puramente francés y con disputas puramente francesas), la nouveau roman (desconozco por qué sólo se habla de ella en los círculos literarios, cuando a mí me parece interesantísima) o el movimiento Oulipo (integrado en su mayor parte por franceses aunque con vocación de ser movimiento internacional). Hoy cuentan con escritores de talento un tanto inclasificables como Quignard, Nothomb o Pennac, si bien siempre contaron con algunos de ellos (¿dónde situar a Valery?¿Y dónde a Duras?<br /> <br />A veces las disputas geográficas y políticas ciegan nuestros sentidos lectores (son cinco, los mismos que nos permiten movernos por el mundo) y obviamos las literaturas de otros países, sin tener en cuenta que ellos también escriben y que, nos guste no, a veces lo hacen mejor que nosotros. No es, sin embargo, una cuestión de comparar unas literaturas con otras, sino de disfrutar lo mejor de cada una. Estas líneas pretendían tan sólo enfatizar lo que merece la pena de nuestros vecinos.<br /><br />Otro día hablaremos de Portugal.<br /><br /> </div>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-36176230032420470232010-10-04T13:28:00.002+02:002010-10-04T13:32:46.153+02:00A propósito de...Daniel Pennac.<div align="justify">Me gustaría suscribir estas palabras: </div><div align="justify"><br /> </div><div align="justify">“Desde el momento en que se plantea el problema del tiempo para leer, es que no se tienen ganas. Pues, visto con detenimiento, nadie tiene jamás tiempo de leer. Ni los pequeños, ni los mayores. La vida es un obstáculo permanente para la lectura.<br />-¿Leer? Ya me gustaría, pero el curro, los niños, la casa, no tengo tiempo...<br />-¡Cómo le envidio que tenga tiempo para leer!<br />¿Y por qué ella, que trabaja, hace la compra, educa a los niños, conduce su coche, ama a tres hombres, visita al dentista, se muda la semana próxima, encuentra tiempo para leer, y ese casto rentista soltero no?<br />El tiempo para leer siempre es tiempo robado. (Al igual que el tiempo para escribir, por otra parte, o el tiempo para amar).<br />¿Robado a qué? Digamos que al deber de vivir. Ésta es sin duda, la razón de que el metro- símbolo arraigado de dicho deber- resulte ser la mayor biblioteca del mundo.”<br /> </div><div align="justify">Son palabras de Daniel Pennac en, <em>Como una novela</em>, un ensayo sobre la lectura, sobre cómo fomentarla y sobre cómo disfrutar con ella. Acompañada además de los derechos del lector, como el de saltarse páginas si le viene en gana, dejar un libro a la mitad o releer otro hasta cien veces seguidas.<br /></div><div align="justify"> </div><div align="justify">Pero conocí a Pennac a través de sus novelas sobre el Señor Malaussene y los crímenes que resolvía casi sin enterarse en los diferentes volúmenes de la serie homónima. La novedad en su estilo es el uso de coloquialismos a los que no estamos acostumbrados en la lectura de novelas de intriga. Los casos parecen estar ocurriendo en nuestro propio barrio y los personajes, a menudo excéntricos y muy muy memorables, recuerdan mucho a los de Eduardo Mendoza en la serie de <em>El laberinto de las aceitunas , La cripta embrujada y La aventura del tocador de señoras</em>.<br /></div><div align="justify">Escribió también Pennac no hace demasiado tiempo otro ensayo, si es que puede llamársele así titulado M<em>al de escuela</em>. No creo que esté dirigido a profesores, ni a padres de alumnos difíciles, sino a todos en general. Él dice que pretende escribir un libro sobre los zoquetes, esos alumnos que parece que no comprenden nada y que nunca llegarán a nada. Él dice haber sido uno de ellos y finalmente llegó a ser profesor de escuela. En realidad habla sobre los zoquetes, pero también sobre las causas de que existan los zoquetes y de cómo superar esa “zoquetería”. Sabe que nadie es infalible y que habrá algunos alumnos que se queden por el camino, pero conserva ese sentimiento, muy común también entre los médicos, de que con ayudar a un solo niño a salir de su zoquetería, es suficiente recompensa. Critica además en este libro muchos de los estereotipos creados por los medios de comunicación acerca de la juventud y propone fórmulas para que los alumnos se interesen por las materias que estudian. Cuenta el caso de un profesor que cada día leía un fragmento de una obra. Los alumnos escuchaban deseando saber qué ocurriría. Finalmente cada año conseguía que los alumnos no esperasen a ver qué ocurría, sino que ellos mismos buscaban esas obras para lleras en sus casas o le preguntaban al profesor acerca de otras obras del mismo escritor.<br /></div><div align="justify">Los libros de Pennac siempre están salpicados de humor y de ganas de vivir. Es por eso que me suele agradar bastante leer libros de este autor y se los recomiendo a cualquiera que desee pasar un buen rato entretenido y de buena literatura.<br /></div><br />P.G.V.Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-34746440106159027782010-10-01T02:53:00.000+02:002010-10-01T02:55:36.412+02:00A propósito de...Rodolfo Walsh.<div align="justify"><br />Hace algunos años (éramos unos pipiolos con ganas de revoluciones), yo insistía mucho a Kay con aquello de que los escritores no sólo tenían que saber escribir buenos libros sino además implicarse en la lucha proletaria y la defensa de los derechos de los ciudadanos. Hoy no suscribo esas ideas. Lo que cada uno haga en su tiempo libre es cuestión de cada uno. Es posible que si Borges o Kafka se hubiesen dedicado a esos menesteres no nos hubiesen ofrecido su obra tal y como hoy la conocemos (bueno Kafka ni siquiera lo quiso pero por suerte sus papeles se salvaron del fuego). <br />A veces, sin embargo, la mejor forma de implicarse en la defensa de los derechos o en una determinada acusación es escribiendo un buen libro. Ya lo hicieron otros, basándose en hechos reales o no. Y entre esos están<em> El otoño del patriarca, Pedro y el Capitán, Ensayo sobre la lucidez, La fiesta del Chivo, El señor presidente o Yo, el supremo.<br /></em>Rodolfo Walsh digamos que aunaba tanto la parte de denuncia literaria como su implicación a nivel personal en todo lo que significase lucha contra las desigualdades y frente a los gobiernos totalitarios, algo que argentina conoció bastante bien (y otros que estamos a este otro lado).<br />Conocí a Rodolfo Walsh por sus cuentos policiales. La novedad que aportan es una interesante descripción de los métodos policiales que habitualmente no suele verse en las novelas policiacas. También estos cuentos presentan una trama excepcional. Si no, no serían buenos cuentos policiales. Además, sus personajes están bien trabajados y pronto es fácil identificarse con alguno de ellos.<br />Pero Walsh tenía otra faceta. La de periodista. Y escribió muy buenos reportajes. Pero sobre todo escribió dos libros excelentes, a medio camino entre la novela y el relato periodístico. Recuerda por momentos a Capote en <em>A sangre fría</em> pero con la excepción de que en este caso el autor sí valora lo que está relatando y se implica en ello. Las dos obras a las que me refiero son <em>¿Quién mató a Rosendo?</em> y <em>Operación Masacre</em>. Ambas presentan un esquema idéntico, con la presentación de los personajes, seguida de los hechos (el primero, el asesinato de varios sindicalistas a manos de sus propios compañeros, el segundo, el fusilamiento de varios civiles sin razones justificadas) y por último el desenlace de los hechos y un epílogo en el que tratan de enmarcarse los hechos en la historia argentina. Walsh fue protagonista de esos hechos porque los dio a conocer a través de sus artículos periodísticos y se jugó el pellejo por publicarlos. Tanto fue así que acabó acribillado a tiros.<br />No merece la pena describir los hechos que narran estas novelas. Es mejor leerlas. Comenzaría con <em>Operación Masacre</em>. Durante su lectura aparecen esos raptos de ira que a menudo se hacen presentes con la lectura de muchas de las novelas que he citado al comienzo. Son esas novelas el testimonio de lo que cualquiera puede llegar hacer cuando se le permite acceder a ciertas cotas de poder.<br />No os lo perdáis. Y si no queréis leer novela-denuncia entonces leed sus cuentos, que son fantásticos.</div><div align="justify"> </div><div align="justify">P.G.V.</div>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-28354280161521559052010-08-24T09:47:00.002+02:002010-08-24T09:51:42.659+02:00El humor de MacedonioNo compraba antigüedades si no las veía hacer; lo que no le permitían; y envidiaba a los ricos de Fenicia o de Egipto que las adquirían baratas y sin padecer , naturalmente, las dudas con las que siempre salía de sus compras de la progresista casa matriz de este comercio, cuyos carteles decían jactanciosos "La Moderna, Antigüedades - Lo más moderno y progresado en Antigüedades".<br /><br />Para más información, acudir <a href="http://www.barataria-ediciones.com/humohaciaelsur/9788495764980.htm">aquí,</a>Pedro Garridohttp://www.blogger.com/profile/02970646405272414089noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-8880316130258507282010-08-10T11:44:00.002+02:002010-08-10T11:47:18.160+02:00Pongamos que hablo de Madrid<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEGaSO2pPuTj23vAM_ln_pKHUOleie5_UPagR9v1GvXVna5fjceXiggS9lwT3lcM7SbFq83nlyRt7A4kRd1wm5Cw1CjXPbu-IOcl4vqorGWtwEoYcQuJKkXRI1lYdu7YrFoE5P/s1600/Nueva+Madrid.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5503715480008687282" style="FLOAT: right; MARGIN: 0px 0px 10px 10px; WIDTH: 320px; CURSOR: hand; HEIGHT: 240px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEGaSO2pPuTj23vAM_ln_pKHUOleie5_UPagR9v1GvXVna5fjceXiggS9lwT3lcM7SbFq83nlyRt7A4kRd1wm5Cw1CjXPbu-IOcl4vqorGWtwEoYcQuJKkXRI1lYdu7YrFoE5P/s320/Nueva+Madrid.jpg" border="0" /></a><br /><div><div align="justify">Siempre se ha dicho que el gran defecto de La Villa y Corte es su ausencia de mar, pero eso no es cierto del todo: existe un Madrid inmerso en el océano, en la isla filipina de Mindanao. Es una población de unos catorce mil habitantes, siendo el más famoso aquel señor que viajó a la originaria Madrid para rodar un anuncio publicitario del Metro.<br /></div><div align="justify">Pero la Madrid filipina no es la única hay. En Latinoamérica, como es lógico, hay más, dos en concreto, en Colombia y en México. El municipio Colombiano recibe su denominación no por la ciudad española, si no en honor de Don Pedro Fernández Madrid, escritor cubano quien vivió en la localidad hasta su muerte. En México, en el distrito de Tecomán, se encuentra la pequeña población agrícola de Madrid, de apenas tres mil habitantes. Fue fundada con el nombre de La Madrid, debido a que la familia más poderosa de la zona se apellida así.</div><br /><div align="justify"><br />Curiosamente, donde más “Madriles” hay es en Estados Unidos. Hasta diez poblaciones llevan nuestro nombre: en Alabama, Colorado, Iowa, Kentucky, Maine, Nebraska, Nuevo México, Nueva York, Misuri y Virginia. Como curiosidad, la ciudad de Madrid en el estado Misuri conforma el epicentro de la zona sísmica más activa de todo Estados Unidos, la cual lleva por nombre Zona Sísmica de Madrid.</div><br /><div align="justify"><br />Y por último, saber que existe un Madrid más, en Uzbekistán. Hace más de seiscientos años, el soberano de aquel entonces decidió fundar una nueva ciudad a las afueras de Samarkanda, como homenaje al primer embajador internacional que fue a visitarle, Ruy González de Clavijo, natural de Madrid.</div><br /><br /><div align="justify">Todo lo expuesto demuestra que la fama que tenemos los madrileños de exagerados y de prepotentes es incorrecta. Para los que no lo sepan, siempre que nos preguntan de dónde somos respondemos “de aquí, de Madrid”, aunque estemos en Groenlandia. Pero es que, visto lo visto, Madrid está en todas partes realmente.</div><br /><br /><div align="justify"></div><br /><br /><div align="justify"><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><br /><br /><div align="justify"></div><br /><div align="justify"></div></div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-7743721.post-24880575222241260722010-08-03T13:24:00.002+02:002010-08-03T13:26:19.807+02:00El hombre desnudo<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhCfljJEsfjWdKFWqbh4o4GK9nVWPSXzT905nRMLWkNyLBFx5i3ifQt_4BDGKVJc-gQ_eH0dhoS_pdI6CYV8o4UcGXpbZUJYrdBknbx_t1xvII_RrdRMc6XrWz6_3v_Pei1Ib7j/s1600/Naked.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5501143360807359026" style="FLOAT: left; MARGIN: 0px 10px 10px 0px; WIDTH: 234px; CURSOR: hand; HEIGHT: 208px" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhCfljJEsfjWdKFWqbh4o4GK9nVWPSXzT905nRMLWkNyLBFx5i3ifQt_4BDGKVJc-gQ_eH0dhoS_pdI6CYV8o4UcGXpbZUJYrdBknbx_t1xvII_RrdRMc6XrWz6_3v_Pei1Ib7j/s320/Naked.jpg" border="0" /></a><br /><div></div><div>Íbamos paseando juntos, Ana y yo, cuando le vimos. Pareció surgir de la nada, como esos pensamientos recurrentes y adormilados de las tres de la mañana. El hombre, desnudo y joven, de unos treinta años mal llevados, miraba a su alrededor, incrédulo, dudoso acerca de la palpable realidad que lo rodeaba.<br /></div><br /><div>-Mira, cariño,- me dijo Ana, -un hombre desnudo. Pobrecito, ¿estará enfermo?<br /></div><br /><div>El hombre desnudo, que intentaba tapar sus órganos sexuales con manos trémulas, nos miraba como si nos conociera de algo, pero sin atinar de dónde y porqué. A nosotros, sin embargo, no nos resultaba vagamente familiar siquiera.<br /></div><br /><div>Nos acercamos más a él, aunque con precaución. Podría tratarse de un loco peligroso aunque, no sé porqué, no nos daba esa impresión. Más bien parecía un hombre cuerdo envuelto en una situación absurda y que le superaba por completo.<br /></div><br /><div>-Disculpe,- inquirí yo a pocos metros del hombre desnudo, -¿se encuentra usted bien?<br />Sus ojos se encontraron con los míos y permanecieron fijos en ellos durante un rato demasiado largo para mi propia comodidad. De repente, sonrió y suspiró, como si hubiera entendido a bote pronto todo el asunto. Incluso retiró las manos, dejando al descubierto sus partes pudendas. Y, en menos tiempo del que se tarda en contarlo, cerró los ojos y desapareció de golpe. </div><br /><div></div><br /><div>Sencillamente, estaba ahí un segundo antes y luego ya no estuvo más. Esfumado.<br /></div><br /><div>Nos quedamos perplejos ante la extraña experiencia que acabábamos de vivir, dudando de su empirismo y de su ilógico final.<br /></div><br /><div>La respuesta, la obvia respuesta, golpeó nuestros cerebros a la par, tras varios minutos de velada deliberación: el hombre soñaba que estaba desnudo, y cuando se dio cuenta de ello, cuando fue consciente de que era un sueño y nada más, decidió despertar.<br /></div><br /><div>La pregunta subsiguiente tampoco tardó en llegar: entonces, ¿estábamos nosotros dentro de su sueño? ¿Éramos acaso un mero sueño del hombre desnudo?<br /></div><br /><div>Ana me abrazó, con el miedo que tienen los niños y los ancianos ante la muerte, el miedo terrible a no ser nada más que humo. Pero, ¿acaso no lo somos todos, al fin y al cabo? Quizá apenas seamos el sueño de alguien.</div><br /><div>Todos nosotros.</div><br /><div></div><br /><div></div><br /><div><strong><em>Cayetano Gea Martín</em></strong></div><br /><div></div><br /><div></div>Kayhttp://www.blogger.com/profile/03102783872547717532noreply@blogger.com3